2/03/2009

URGENTE!

Pobre Atleti


Sorprendido con la noticia de que Javier Aguirre dejó de ser el técnico colchonero me encuentro. Una decisión injusta a todas luces, tanto para el club como para el técnico y los jugadores. El proyecto de Aguirre se acabó en el 2009, y eso que apenas llevamos un mes. Dos puntos en cinco partidos, la eliminación de la copa y el Vicente Calderón al borde de un ataque de histeria fueron suficientes.

Hablar de Javier Aguirre no es difícil. Es un tipo honesto, sincero y decente; unas cualidades poco comunes en estos días y mucho menos en el mundo del fútbol. Es verdad que el club estuvo a punto de despedir a Aguirre en muchas ocasiones. Aguirre nunca ha estado plenamente fortalecido en el banquillo, ni cuando dejó cuarto al Atleti la temporada pasada.

Y aunque fue el técnico que metió al Atleti por primera vez en su historia en la UEFA Champions League, su cabeza rodó sin pena ni gloria. Sin embargo si quiero dejar algo en claro, como amante del fútbol que soy, y es que era un calvario ver jugar al Atlético de Madrid desde que Aguirre tomó las riendas del equipo. Nunca contó con un esquema definido, ni estilo, ni un plantel con personalidad. Siempre jugó como un equipo pequeño, vulgar, sin alma.

Dinamita pura en la delantera (Torres primero, Forlan y Agüero después) eran todos los argumentos con los que contó el proyecto de Aguirre para obtener los logros que obtuvo. Nada más. Tiene un par de hombres hábiles arriba (Simao y Maxi), pero todos los demás son jugadores vulgares para un equipo de estos tamaños. Claro que el no tiene la culpa de la baja de juego de Agüero, de los groseros errores de Heitinga, ni de la absurda política de fichajes, pero lo cierto es que, para mi, el ciclo de Aguirre había terminado antes de iniciar esta temporada.

Ahora lo despiden en el peor momento de la temporada. A estas alturas, un día después de cerrarse el mercado de fichajes, Javier era el único capaz de sacar al equipo adelante. Pobre del nuevo técnico, que tendrá que cargar con una responsabilidad enorme en un club inestable y con una eliminatoria de Champions a la vuelta de la esquina. Pobre.

Se va por la puerta de atrás un mexicano inteligente, honesto y muy buena gente; que nunca, jamás, me gusto como hizo jugar al Atleti. Pobre Atleti...


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